Nicole Gilbert es una prestigiosa psiquiatra de Washington que, ante el reto de valorar los posibles trastornos de conducta de una adolescente, Allyson Shada, se ve en la obligación de regresar a Boston, su ciudad natal, donde cinco años atrás dejó abandonada toda su vida.
Al llegar a la ciudad, todo su mundo se trastoca. El regreso a casa se convertirá en una pesadilla. Los amigos de la infancia, los antiguos compañeros de trabajo y el acoso de Alan Peterson, su ex marido, traerán dolorosos recuerdos que la llevarán al límite. Pero todo ello hará que también afloren sentimientos y sensaciones dormidas.
Alan y ella no podrán evitar la atracción sexual que todavía sienten el uno por el otro mientras un peligro muy real la amenaza de nuevo.

Esta novela fue la elegida con la que nos embarcamos en el club “De viaje literario” y la que tanto gusto me da compartirla con las compañeras. Por mi parte no ha sido una novedad, pues la leí hace tiempo y ya en su momento fue una novela que me gustó muchísimo. Así que, al salir escogida, lo mío ha sido relectura y el factor sorpresa no lo he tenido pues ya sabía en todo momento lo que iba a ocurrir. ¿Pero eso ha hecho que me guste menos ahora? Pues no, la he vuelto a disfrutar y cosas que aquella vez no congeniaba desde el principio hasta que no me iba llegando la información mientras avanzaba en la novela, ahora lo he visto de otro modo y me he podido fijar más en pequeños detalles.

Nicole se dedica a la psiquiatría y tiene que evaluar el caso de una muchacha acusada de asesinato. Para ello tiene que volver a la ciudad que una vez fue su hogar, llena con buenos y malos recuerdos y de la que huyó mucho tiempo atrás abandonándolo todo. Allí ella atravesó hace años un oscuro momento de su vida que le costó lo que ella más amaba. Así que el regreso no le es nada fácil.

Alan Peterson, es un hombre de fuerte carácter resentido con su ex esposa. La mujer que tanto amaba, pero que un día ella lo abandonó, no sin sus motivos. Él piensa lo peor de ella, y también sus razones tiene. Él (psiquiatra igualmente) ha rehecho su vida, y junto con sus socios mantienen un centro psiquiátrico.  Al principio, el choque entre ellos es inevitable ya que para Alan afloran viejos resentimientos, pero también fuertes sentimientos que creía superados.

Entre ambos estará el caso de la muchacha interna que tienen que evaluar, pero el pasado lleno de oscuridad que Nicole creía enterrado vuelve a resurgir y sus peores temores vuelven a presentarse.

Es una novela de segundas oportunidades llena de intriga, un thriller psicológico que engancha desde sus primeras páginas y que hace que no te despegues de ella. En su día, no paraba de hacer suposiciones y aún recuerdo que personalmente no me imaginé el resultado.

La historia excelentemente desarrollada, para mi forma de verlo está muy bien combinada la parte romántica con el thriller, aunque sí que es verdad que no tiene esas escenas tórridas de enamoramiento. De vez en cuando la lectura nos muestra una pizca de esos momentos en las que ambos eran pareja y que nos hace comprender mejor sus sentimientos actuales.

El estilo de Ana R. Vivo (también conocida con el seudónimo Dana Jordan) me gusta mucho. Es fluido y está muy bien narrada. Los diálogos muy buenos y los personajes muy bien perfilados. El problema psicológico está para mi gusto muy bien llevado y caracterizado en los personajes que aparecen.

Una novela que ha sido un placer volver a releer, aunque esta vez no he participado tanto en los comentarios entre mis compañeras por temor a poder desvelar algo sin querer.

Si pincháis en la imagen de abajo os llevará a los enlaces de mis compañeras del club De viaje literario,  y que conforme vayan publicando sus reseñas añadiré sus enlaces.

Editorial: Ediciones Kiwi

Edición: Papel y digital

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Otras reseñas de sus libros en el blog con su otro seudónimo ‘Dana Jordan’: “Oscura fascinación” / “Sublime tentación“